domingo, 25 de diciembre de 2011

Fin de año (Claves para empezar 2012 mojando)

Aunque en algunos calendarios comenzar con mal pie el año es señal de buena fortuna para lo que resta, lo cierto es que pasar las primeras horas de 2012 entre las piernas de una mujer puede insuflarnos una dosis de moral que agradeceremos en los meses venideros. Ya sea para romper el mal fario que nos ha podido perseguir en el año que toca a su fin o simplemente para continuar inmersos en esa sorprendente racha de victorias, empezar la nueva temporada mojando es la mejor fórmula para afrontar con optimismo y valentía los retos que se avecinan. Y también porque no está la cosa como para perdonar oportunidades y si conseguimos una victoria tempranera, ya nos aseguramos no terminar la campaña con una desoladora sequía.

Aunque a priori parezca una tarea sencilla, taladrar a una fémina en fin de año puede presentar bastantes complicaciones. En primer lugar, debemos tener en cuenta a qué tipo de evento social acudiremos. He aquí los ejemplos más básicos. Intentaremos definir qué pautas son necesarias para cada situación.

Cotillón (Fiestas de barra libre en hoteles, macrodiscotecas o similares): Opción muy dura, más aún si nuestra edad se acerca peligrosamente a la treintena. Personalmente, hace tiempo que no acudo a una celebración de estas características, pero lo que más predomina es la chavalería, en su mayor parte masculina. La competencia puede llegar a resultar agotadora y hay pocos grupos de hembras sin compañía. Podemos aprovechar la brega para pedir una copa en la barra, para entablar conversación, aunque lo más seguro es esperar a las rebajas de última hora. Siempre hay chicas para las cuales comenzar el año con sexo es una imperiosa necesidad. Sí, suelen ser las peores.


Reuniones en una casa: Aquí lo más importante es conocer el mercado antes de actuar. Informarnos de la situación sentimental de las asistentes, nos ahorrará tiempo y más de un disgusto. No mola nada estar trabajando horas para que el final nos cuente, entre sonidos guturales propios de la embriaguez, lo mucho que quiere a su novio. Por eso, debemos centrar nuestros esfuerzos en una presa factible. Sin prisa, trataremos de ejecutar nuestro plan cuando se acerque el amanecer. Es esencial que nos quedemos a dormir en la casa, eso nos proporcionará una coartada. Aunque suena muy bonito eso de conocer al amor de tu vida en Nochevieja, esto no es una película. Nada de móviles ni de proyectos a largo plazo. Hoy lo que cuenta es meter.

Nochevieja alternativa: Quizás hemos decidido hacer un viaje para comenzar el año en otra ciudad. O hemos optado por acudir a una fiesta mañanera del día 1. O simplemente, hemos salido al local del barrio, como hacemos gran parte del año. Si el destino nos sonríe, quizá fuera de la masificación encontremos un reducto interesante de mujeres. Si estamos en una sala pequeña lo bueno es que ellas no tienen mucho donde elegir y el contacto se termina por producir, de una u otra manera. La parte negativa es que, de no ser los elegidos, el golpe en nuestro ego será mayor. Los triunfos se celebran mejor en pequeños grupos y las derrotas es mejor esconderlas en las aglomeraciones. Otra cosa diferente es acudir a una macrofiesta del día 1. Ahí las sustancias y la chavalería antes mencionada van a ser la tónica habitual. Por una parte, todo vale y por otra, puede darnos bastante pereza emprender conquista alguna en esas circunstancias.

Normas generales de conducta: Lo de llevar ropa interior roja no nos asegura el éxito, aunque para los más exhibicionistas puede servirles de excusa para mostrar el material. Otra cosa, el típico beso de las doce después de las campanadas es demasiado típico y hortera, pero si os funciona… Por último, no seamos demasiado exigentes con nosotros mismos. Trabajemos sin presión y confiemos en el factor suerte.

Y si nada de esto da resultado… Pues ya sabemos lo que hay. Podemos rascarnos el bolsillo (forma un poco sórdida de comenzar el año) o retirarnos a nuestros aposentos a darle a la manivela. Si al final caemos derrotados, no pasa nada, es una noche cualquiera, una noche más en la que hemos fracasado. Tampoco debería sorprendernos.

P.D: Algún día hablaré de los locales de ‘swingers’, los de intercambio de parejas vamos… Mucha tela. Os dejo esta viñeta que he encontrado a modo de broma. Chicas, no os ofendáis...

jueves, 15 de diciembre de 2011

Retrato de una obsesión

Cristiano Ronaldo marcó el gol que cerraba casi de forma definitiva la eliminatoria del Real Madrid en Ponferrada en la Copa del Rey. El luso, según dicen, llegaba con el orgullo herido y con el ánimo ciertamente tocado, después del varapalo del clásico. Para Cristiano no fue una derrota cualquiera. Sus dos ocasiones falladas dejaron en entredicho su capacidad en los encuentros de peso. Concretamente, sus errores dejaron en evidencia, para algunos, la obsesión que le paraliza en los enfrentamientos con el Barcelona, su ansiedad de salir victorioso en la eterna comparación con Leo Messi.

Aunque ya consiguiera anotar el único tanto que significó el, hasta hoy, único título en las vitrinas de José Mourinho como entrenador merengue, para el portugués no es suficiente. Sometido al cruel juicio que eleva el duopolio de la Liga a una batalla individual, Cristiano sintió la derrota ante el Barcelona como propia. En León jugó de titular por petición propia. Cuando marcó, no lo celebró y sus compañeros únicamente se atrevieron a darle ánimos: no era momento para festejos. En su cabeza todavía se presenta, cual pesadilla, la imagen de ‘la Pulga’, zafándose de todos sus rivales una y otra vez. Visiblemente perturbado por su actuación en el Bernabéu, Cristiano aguantará la pesada losa del plebiscito popular hasta que vuelva a medirse con su Nemésis.



El partido entre Real Madrid y Barcelona ha dejado multitud de análisis posteriores, una gran mayoría de ellos psicológicos. Por si fuera poco, el portugués tiene que soportar los consejos de desconocidos, viéndose en una especie de terapia colectiva para calmar su ansiedad cuando llega el esperado día D. Es como si Cristiano se tumbara en un diván a la vista de todos, como si sus miedos o inseguridades fueran ahora motivo de debate nacional.

Y es que a veces deseamos un objetivo con tanta intensidad que termina perdiendo el sentido. Nos nublamos, nos obcecamos y no atendemos a razón alguna. “Tiene que ser mía”, nos repetimos sin cesar. Esto, que puede tener consecuencias mínimas en una noche, adquiere dimensiones mucho mayores si hablamos de la vida cotidiana. Tendemos a malinterpretar las señales, a considerar una cuenta pendiente lo que en realidad no es ni una cuenta.

La obsesión puede hacernos adoptar diversos papeles que terminarán por descubrir nuestras verdaderas intenciones y hacernos un daño devastador:

Eterno Mejor Amigo (EMA): Todas las tías tienen uno de estos (o varios, vaya usted a saber), pululando por su alrededor. Suelen ser poco agraciados físicamente y admiten con recelo las nuevas relaciones de su amor platónico. Por favor, intentemos evitar convertirnos en el personaje que tantas veces hemos repudiado.

Acosador nocturno o ‘Babas’: Se caracterizan por ser muy empalagosos y palpar con cualquier excusa. Ya han dejado claro, medio en serio medio en broma, que su meta última es la penetración. Esto dota de una ventaja inmensa a la fémina, que sabe que siempre tiene una opción para cuando las vacas se presenten flacas. Otra más. Actitud que entraña menos peligro que la de EMA, pero igual de condenable

El ingenuo: El más común. Solamente pasaban por allí y se les vino todo el chaparrón encima. Cometieron el error de idealizar a una mujer del montón y ahora no hacen otra cosa que autoconvencerse de que el sentimiento es recíproco. Confiados e inocentes, prestarán su ayuda siempre que sea posible. El contacto, en este tipo de situaciones, se basa sobre todo en las redes sociales o el mundo virtual, lo que multiplica las interpretaciones erróneas. Aquí hemos caído todos. Lo importante es retirarse antes de que nuestra dignidad sea pisoteada. Si lo conseguimos, evitaremos ser un EMA o un ‘Babas’, lo cual ya representa un triunfo.

domingo, 11 de diciembre de 2011

El primer reto

Nosotros mejor que nadie sabemos que el camino hacia la victoria presenta muchas y variadas complicaciones. Alejándonos de lo sencillo, de lo normal, de la corriente generalizada, nunca caminamos en línea recta... Nos van más las curvas.

Ha llegado el momento de que deis un paso al frente. FNYT participa, por primera vez, en el concurso '20 blogs'. Hermanos de la noche, definitivamente es vuestro turno.

Premios 20Blogs

viernes, 9 de diciembre de 2011

Fallos de comunicación (o las cagadas nocturnas)

Mensajes encriptados. Misivas ambiguas. Frases complejas que encierran una sinceridad desgarradora. Complejas tramas que esconden obviedades. Interpretaciones erróneas. Tendencia al maniqueísmo. Silencios incómodos. Retahílas interminables para explicar evidencias. Dificultad, al fin y al cabo, para que la comunicación entre emisor y receptor sea fluida. Sin embargo, precisamente esa capacidad de esconder con cierta celosía algunos secretos ejerce, habitualmente, de extraña fuerza de atracción. Para entendernos, las cagadas que a menudo cometemos con un teclado como principal arma ejecutora.

Fran Sol, futbolista del tercer filial del Real Madrid, dejó entrever en su twitter que gran parte de la cantera estaba enojada por el trato de supuesto favoritismo que recibió Pedro Mendes, al ir convocado con el primer equipo e incluso disputar unos minutos en Ámsterdam. Después Fran, quién sabe si presa del pánico, intentó arreglar el desaguisado comentando que un buen amigo suyo había hecho un mal uso de su teléfono móvil. El susodicho responde al nombre de Ismael, que fue trendingtopic durante unas horas del jueves.

Fran Sol se vio devorado por la presión y llegó al extremo de explicar que estaba en el proceso de dar las pertinentes indicaciones a Ismael para que se hiciera una cuenta su propia cuenta y explicase la verdad. Si esto encierra un verdadero desencanto de la cantera no lo sabemos, aunque lo podemos sospechar. Las formas, como de costumbre, no fueron las correctas. Ya pasó con Domínguez después del derbi, que dejó un incendiario mensaje insinuando que el Madrid se veía favorecido por los árbitros. O Jorge Pulido, otro canterano rojiblanco que emulando al Granero más filósofo, lanzó un dardo a Manzano, afirmando que se aburría si el cuento siempre tenía el mismo desenlace.

Este tema merece un capítulo aparte cuando hablamos del plano afectivo, sexual o de ambas cosas.. Tan habituales como destructivos son los mensajes enviados a horas intempestivas. El alcohol nos hace sentir una euforia que en demasiadas ocasiones esconde la mayor de las nostalgias. Sí, de acuerdo, muchas veces sólo queremos echar un polvo antes de regresar cabizbajos a casa, pero ellas no tienen por qué saber de nuestras intenciones.

Cuando pulsamos la tecla de envío, ya no hay marcha atrás. Debemos afrontar la realidad. La peor respuesta, sin duda, es la ausencia de la misma. Eso sólo contribuirá a turbar nuestra mente con imágenes poco placenteras, que por desgracia, muchas veces se corresponden a la realidad. Quizás esté dormida o tal vez no lo haya visto. Esto supone un efímero alivio a nuestra ansiedad porque la mañana siempre llega. La realidad se asoma como un gigante de dimensiones insospechadas. Es el momento de dar explicaciones. Y a diferencia de los personajes que pueblan el fútbol nacional, nosotros no tenemos a un Karanka o a un Ismael que nos sirva de escudo.

P.D: Me dicen que ‘La Boite del Pintor’ vuelve a estar a tope. Menos vejestorios, más opciones. Habrá que comprobarlo.

martes, 6 de diciembre de 2011

El nueve puro (o la ausencia de la Justicia Poética)

El Rayo Vallecano volvió a dejar grandes sensaciones en el Vicente Calderón. El planteamiento de Sandoval, alabado por todo el mundo del fútbol, es valiente y atrevido en cualquier feudo y ante cualquier rival. Piti, Michu o Lass son algunas de las relevaciones de la Liga, pero en muchas ocasiones al equipo obrero por antonomasia del fútbol madrileño no le basta con ello. En el Calderón pagó de nuevo su falta de puntería, las dificultades a la hora de definir. Muchos echan en falta un nueve puro en el ataque franjirrojo.



Al Atlético le fue suficiente con tres fogonazos aislados. Es lo mínimo que se le puede pedir a un plantel que cuenta entre sus filas con jugadores como Diego, Arda Turán o Falcao. También está José Antonio Reyes, al que la afición le ha encumbrado de una manera que se antoja un tanto excesiva. Da la sensación que la afición ha elegido al de Utrera como una especie de símbolo ‘anti Manzano’. El jienense vio las orejas al lobo y le puso de inicio ante el Rayo. Es curioso, la afición, con mayor o menor razón, da su veredicto en cada partido: “Reyes sí, Manzano no” y la directiva podría estar en proceso de vender al andaluz. This is Atlético, amigos, aunque eso es otra historia.

A lo que íbamos. El Rayo, como muchos otros equipos de la zona medio baja de la Liga española, paga con creces sus errores de cara a la portería. En esto del fútbol lo que siguen contando son los goles y la justicia poética queda relegada a un segundo plano. Es cruel, pero es real.

Ahora que se acerca la Navidad y como bien recuerda Pandora, las reuniones sociales se repiten con mucha asiduidad, la definición se antoja como vía fundamental para terminar o empezar el año con buen pie. Muchos se pierden en largas conversaciones nocturnas que surten un efecto contraproducente en la víctima elegida, que cae en un estado de vahído, en el que la reanimación es una utopía.

Son jugadores que gustan de florituras, arrogantes en ocasiones, dicharacheros y grandes oradores, pero faltos del toque final que tanta importancia cobra cuando hablamos de mujeres. Muchos os habréis indignado con las típicas injusticias nocturnas: lleváis una hora hablando con vuestra damisela preferida y cuando la vejiga pide a gritos una visita al baño, la situación ha cambiado. El definidor ha hecho aparición y de nada vale que os sepáis las tramas familiares de la chica en cuestión, el primer disco que se compró o toda su trayectoria sentimental. Sin excesivo trabajo, el enemigo ya le ha robado un beso. Eso os deja en una situación delicada. Habiendo perdido de vista a vuestros compañeros, con la noche ya casi acabada y visualizando el fracaso en primer plano. El fútbol, como la vida, como la noche, como todo lo que de verdad nos interesa, no entiende de justicia poética ni de buenas intenciones. Y es una lástima.